Trono procesional de Jesús Narareno “El Pobre”
Realizado en 1956 por el tallista granadino Antonio Díaz Fernández, se trata de una obra neobarroca, tallada en pino de flandes y dorada en oro fino. Cuenta con cuatro cartelas con exuberante decoración vegetal, situadas en el centro del frontal, trasera y ambos laterales. En ellas encontramos bustos policromados y estofados de la Virgen María, San Juan Evangelista, Santiago y María Magdalena. Destacan su estructura curvilínea y los valientes róleos de sus esquinas. La iluminación del conjunto está a cargo de 4 arbotantes, formados cada uno por cuadro querubines que portan un farol sobre sus cabezas.
Fue restaurado y dorado de nuevo entre 1990 y 1991 por el tallista y dorador malagueño Rafael Ruíz Liebana, que ha realizado una nueva restauración de los arbotantes y reparación de los daños sufridos por el dorado del trono que estrenará en la semana santa del 2009.